Ayer miércoles por la noche, un hincha de Estudiantes de La Plata fue detenido por arrojar a golpes a otro seguidor del club al foso del Estadio UNO Jorge Luis Hirschi, en medio del partido contra Bragantino por la Copa Sudamericana.

El hecho fue filmado por teléfonos celulares y demuestran la ferocidad de la agresión. En el video que ilustra esta nota, la víctima es enfrentada por el agresor mientras esta sentada en la valla de contención. Tras una discusión, lo golpea en la cara y lo lanza al vacío. Así, cae en el foso.

La víctima solo sufrió contusiones leves, según determinaron médicos presentes en el operativo del partido. Las heridas no ameritaban un traslado a un hospital, consideraron los médicos. Sin embargo, la acusación es grave: tentativa de homicidio, según información policial a la que accedió Infobae.

Así, personal de la Comisaría 9° de la Policía Bonaerense detuvo a a un sospechoso, identificado como L.J, platense, de 32 años. El expediente en su contra está a cargo de la UFI N°3. El motivo de la pelea todavía queda por esclarecerse, aunque investigadores del caso hablan de una pelea casual, sin relación con internas barra.

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Este se trata del segundo caso que involucra un accidente de un hincha en un estadio, luego de que el sábado pasado un simpatizante de River Plate muriera en el Estadio Mâs Monumental, producto de una caída al vacío desde la platea Sívori Alta. El fallecimiento del hombre identificado como Pablo Marcelo Serrano, de 53 años, obligó a la suspensión del encuentro contra Defensa y Justicia.

Mientras que el caso del fallecido simpatizante millonario se encuentra bajo investigación, a cargo de la fiscal Celsa Ramírez de la Unidad Fiscal Especializada en Eventos Masivos de la Ciudad, la hipótesis que sostienen los investigadores plantea que la víctima se cayó de la bandeja en un intento de sentarse sobre la pared que funciona como baranda del sector.

“Creemos que quiso sentarse -como lo estaban haciendo otros hinchas- y perdió el equilibrio porque puso todo el peso del cuerpo en el tronco superior”, explicaron las fuentes del caso a las que tuvo acceso Infobae.

La autopsia reveló que el hombre falleció al instante por haber sufrido un politraumatismo con fractura de cráneo y pérdida de masa encefálica, como consecuencia del golpe que se dio contra la fosa de seguridad ubicada a 20 metros de distancia de la tribuna en la que se encontraba. Por el momento, los resultados de las pericias toxicológicas que le realizaron al cuerpo no han sido reveladas, por lo que no se puede precisar si se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia que afectaran su juicio o capacidad motora.

Pese a que Celsa Ramírez descartó que la muerte haya sido motivada por una pelea barrabrava, la fiscal advirtió que el caso será investigado bajo el Art.2 de Ley N° 24.192 del Código Penal, conocida como la Ley del Deporte, que garantiza la prevención y represión de la violencia en espectáculos deportivos masivos.

Por otro lado, la investigadora solicitó al club de Núñez la entrega de las cintas de vídeo captadas por las cámaras de seguridad que apuntan a la Sívori Alta, debido a que estas lograron grabar el momento en el que el hincha se resbaló y desapareció entre el hueco que separa al sector de la plataforma de altura media.

A raíz del análisis de las imágenes, la fiscal determinó que el hombre haya intentado aferrarse a las banderas colgadas del muro, así como también aseguró que no habría existido una disputa previa con el resto de los asistentes. De hecho, al momento de percatarse del incidente, los mismos hinchas presentes pidieron frenar el partido al solicitar la presencia de los médicos de urgencias y de la policía.

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Tres delincuentes balearon a un hombre de 56 años en su casa, ubicada la localidad de Lomas del Mirador, en La Matanza. La víctima murió al llegar al hospital por las graves lesiones sufridas.

El fallecido fue identificado como José Luis Barrientos de 56 años, quien se encontraba en su vivienda, ubicada en el cruce de las calles Formosa y Nazca al momento de ser sorprendido por quienes serían luego sus asesinos.

Pese a que aún se desconoce cómo sucedieron los hechos, se sabe que uno de los delincuentes comenzó a disparar y una de esas balas alcanzó al hombre, quien cayó al piso de inmediato. Tras el hecho, los agresores huyeron sin robar nada de la propiedad.

En consecuencia, Barrientos fue trasladado de urgencia por sus familiares a un centro de salud de la zona, donde fue asistido por los médicos, pero no sobrevivió y falleció a los pocos minutos a raíz de las graves lesiones sufridas.

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De esta manera, el fiscal Matías Folino, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza, dispuso que se realice la autopsia correspondiente. Mientras se esperan los resultados de las pericias, los investigadores intentan identificar a los agresores a través de algunos testigos para poder esclarecer en qué circunstancias se dio el asesinado. Por el momento, no descartan ninguna hipótesis como móvil del ataque, de acuerdo con la información de Télam.

El asesinato del hombre de Lomas del Mirador sucedió tan solo días después de que un niño de 9 años muriera en Virrey del Pino, tras agonizar por más de una semana después de haber recibido un disparo en su hombro izquierdo y otro en la mandíbula en medio de una balacera.

El hecho se desató durante la noche del 18 de mayo, alrededor de las 23:00, frente a un domicilio ubicado en la calle Carlos Gardel al 5000, a metros de la Ruta Nacional 3. En ese momento, Rodolfo, el padre del chico, llegaba junto a su hijo a bordo de una Volkswagen Surán cuando fue sorprendido por un ladrón armado que llegó a pie.

Luego de varias amenazas y forcejeos contra el hombre que se resistió a entregarle el auto, el delincuente abrió fuego y, como consecuencia, el menor resultó gravemente herido.

Sin poder pedir ayuda, el padre se acercó hasta la cancha de futbol lindera a su domicilio; de esta manera, consiguió que un hombre los trasladara al Hospital Simplemente Evita de Gonzalez Catan.

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“Cuando me llevaron a declarar estaba la persona que auxilió al nene y dijo que un hombre se presentó con el chico pidiendo ayuda y él lo acercó al primer hospital que hay en la zona”, narró Diego, un vigilador que esa noche trabajaba custodiando un trailer en el barrio, durante un diálogo con TN. Además agregó que el asesino se subió al vehículo robado y escapó por colectora luego de disparar su arma tres veces.

La víctima falleció nueve días después del ataque tras sufrir una muerte cerebral en el Hospital de Niños de San Justo, donde había sido derivado tiempo después del hecho. La investigación del caso quedó en manos del fiscal Gastón Bianchi, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°5 del Departamento Judicial La Matanza, quien ordenó recabar más testimonios y relevar cámaras de seguridad con el objetivo de identificar al agresor.

Aunque todo indica que fue un robo, aún no descartan la hipótesis de que haya sido un ajuste de cuentas entre las partes implicadas.

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Dante Godoy García, un joven de 21 años, fue asesinado a tiros en la localidad bonaerense de Cuartel V, partido de Moreno, por un ladrón que intentó robarle el celular.

El hecho ocurrió el último lunes por la noche, cerca de las 21 horas en la calle Portugal entre Sócrates y 2 de Septiembre, cuando la víctima, regresaba a su casa de un curso de electricista que realizaba en una escuela técnica de la Fundación Uocra, junto con un compañero. En ese momento, fueron abordados por un delincuente que iba en bicicleta y, tras apuntarle con un arma, les pidió que le entregaran sus celulares.

El agresor les advirtió: “Tengo un arma, tengo un arma”. Y al darse cuenta de la situación, su compañero detuvo su marcha unos metros antes para evitar el robo, mientras que Godoy García intentó protegerse con la mano. Sin embargo, el asaltante abrió fuego y le disparó.

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Ya herido, el joven intentó escapar pero el delincuente le tiró de nuevo y cayó al suelo, a unos pocos metros. Luego del ataque, el agresor escapó en su bicicleta, sin haberle robado ninguna pertenencia. En tanto, el otro chico corrió hacia la casa de uno de los tíos de la víctima para avisar lo que había pasado.

Ante la demora de la ambulancia, los familiares de Dante lo trasladaron de urgencia hasta la Unidad de Pronta Atención Nº 12, donde llegó muerto como consecuencia de las balas que recibió. Años antes, Dante se había recuperado de un tumor cerebral.

Tras el hecho, oficiales de la comisaría local fueron alertados y un testigo fue entrevistado por personal de la UFI N°3 de Moreno que hoy trabaja con diversas medidas para encontrar al sospechoso, aseguraron medios que adelantaron el caso como Semanario Actualidad y Primer Plano Online.

“Me enteré porque el tío de Dante, mi ex cuñado, me dio la noticia cuando sucedió, porque pasó cerca de su casa, y ahí fue cuando me avisaron”, contó en diálogo con Infobae, Edgar Godoy, padre del joven asesinado.

“Ojalá que se haga justicia y que no vuelva a pasar esto nunca más, porque Dante era un chico trabajador y estaba estudiando. Era sano, sano como él no había otro. Ojalá que esto sirva, se haga justicia y que no vuelva a pasar más”, siguió Edgar.

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A los 12 años, Dante había sido operado de un tumor cerebral maligno, un meduloblastoma, que le implicó tratamientos de radio y quimioterapia y una extensa recuperación. Sin embargo, según relató Mariela Godoy, tía de Dante, en comunicación con este medio, con el tiempo logró rehabilitarse y comenzó a llevar una vida normal. “Tuvo un tumor cuando era muy chico, pero se logró recuperar de esa enfermedad”, dijo. “Ayer mi hermano me llamó a las seis de la mañana, avisando que a Dante lo habían matado. Un hombre en una bicicleta le pidió que le diera todo, él se asustó y ahí es cuando le dio el disparo. No sabíamos muy bien cómo había sido. Le dio por la espalda”, siguió Mariela.

En los últimos tiempos, además de estudiar para ser electricista, el joven trabajaba como personal de mantenimiento en una empresa y se había mudado solo desde hace seis meses.

Dante fue velado en la parroquia de su barrio, donde amigos, familiares y vecinos se acercaron a despedirlo. Además, sus allegados convocaron hoy a una movilización para reclamar por mayor seguridad en la zona y pedir justicia por el crimen del joven. “La familia está destruida, otra palabra no tengo”, concluyó Mariela.

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